Anoche se enfrentaron los que eran los dos equipos más en racha de la liga, con Dallas Mavericks y Detroit Pistons acumulando 6 victorias consecutivas. Pero si lo juzgáramos por el juego, solo uno de ellos parecía llegar en un gran momento.
Los Pistons jugaron bastante mejor que unos Mavericks que aguantaron parte del partido gracias a buenas rachas, pero que al final terminaron cediendo ante la evidencia y ante un rival que jugó mejor. Detroit explotó una de las debilidades de los Mavs, como en concreto la de los problemas para rebotear, capturando 17 rebotes más (60 - 43), incluyendo 18 ofensivos.
"Tuvimos un par de rachas, pero nunca funcionamos del todo bien", dijo Rick Carlisle tras el partido. "Nos ganaron en todos los cuartos, aunque pudimos empatarles uno. Realmente, esencialmente, nos barrieron. De principio a final jugaron mejor que nosotros. No llevan una racha de 7 victorias por casualidad, y están aganando a algunos equipos buenos. Están jugando a un nivel alto y hoy fueron simplemente mejores. Pero no hay excusa para la falta de intensidad en los rebotes y en las pérdidas".
Los Mavs cometieron 10 pérdidas en la primera mitad, y aunque lo controlaron en la segunda para finalizar con 14, muchas de estas pérdidas llegaron cuando Dallas tenía la oportunidad de igualar el partido. Los de Rick Carlisle nunca fueron por delante en el partido, solo lograron empatarlo 3 veces, Augustin firmó su season high en puntos con 26 y Greg Monroe el suyo en rebotes con 18.
"Los problemas de rebote los hemos pagado hoy con creces porque tuvimos algunas pérdidas y no estuvimos muy acertados en el lanzamiento", analizó Carlisle. "Cuando no puedes mitigar el déficit de rebote con esas dos cosas a tu favor, ganar es una tarea difícil. Doy mucho crédito a Detroit. Nosotros simplemente no estuvimos lo suficientemente bien hoy".
"La idea y el objetivo es conseguir ventaja de campo en Playoffs, y ahora mismo no estamos jugando bien en casa", dijo Chandler Parsons. "Es aún pronto pero no podemos permitirnos partidos como este, especialmente en esta conferencia con lo buena que es. Necesitamos victorias como esta y hemos dejado escapar una. No podemos ceder dos, no podemos bajar nuestras cabezas cuando vayamos a jugar contra los Clippers el sábado".
Como indica Parsons, los Mavericks tendrán la posibilidad de resarcirse jugando el sábado en Los Angeles ante los Clippers (21:30 hora española). Con este partido iniciarán otra complicada gira de tres partidos fuera, que continuarán en Sacramento el martes y terminarán al día siguiente en la casa de la altitud, Denver.
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