Tanto Chandler Parsons como Devin Harris se quedaron sin participar en el entrenamiento de ayer, y han sido listados como cuestionables para el Game 2 que se disputa esta noche. Según Rick Carlisle, ambos serán game-time decision.
Parsons sigue lidiando con sus dolores en la rodilla, a pesar de que jugó 37 minutos en el primer partido. Aunque tuvo unos buenos cinco minutos seguidos en los que ayudó a Dallas a meterse en el encuentro, era evidente que estaba cojo, y cabe preguntarse si no hubiera sido más efectivo que jugase un poco menos y Richard Jefferson, quien venía a un nivel aceptable las últimas semanas durante su ausencia, un poco más.
Lo que parece casi inevitable pensar es que a Parsons le espera una visita al quirófano en cuanto los Mavs sean eliminados, aunque sea al menos una artroscopia para ver qué es lo que sucede dentro de su rodilla. Dentro de lo bueno, no ha habido inflamación ni líquidos, pero el alero está lidiando con bastante dolor en la zona.
Harris, por su parte, solo pudo jugar 10 minutos, después de agravar sus dolores en el dedo gordo del pie izquierdo durante el segundo cuarto. Harris dijo que si seguía jugando corría el riesgo de sufrir una fractura por estrés, ya que el vendaje colocaba mucha presión en el dedo de al lado, que casualmente es el que fue reparado quirúrgicamente la temporada pasada. En su caso, dependerá de que el equipo médico encuentre una forma de vendarle que minimice estos problemas.
Si Harris finalmente no está disponible, o si lo intenta y de nuevo no puede seguir, puede que se abra una puerta para que Raymond Felton tenga algunos minutos. Dado su buen nivel en las últimas semanas, a que es mejor defensor que Barea y Ellis, y a que es capaz de presionar a toda pista al base rival, puede ser uno de los revulsivos que necesitan los Mavs, como quedó claro en el primer partido.
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